Las de Barranco

de Gregorio de Laferrére. Dirección Dumas Lerena

Estreno: 4 de junio de 1993. Teatro Solís

"He escrito para el teatro como he hecho muchas cosas raras en la vida: por el deseo de conocer algo que no conocía, de experimentar emociones nuevas; no por aburrirme lo mismo que el día anterior; por halagos de lucha, de investigación, de aventuras... ¡Qué se yo por qué...! Nunca he tomado en serio mi papel de hombre de teatro... Durante largas temporadas prescindo en absoluto de cuanto a él se refiere; en otras, en cambio, lo tomo con empeño casi con fruición. Un día me hizo gracia el teatro: eso fue todo. Y como por hábito hago siempre lo que me causa placer, hice teatro... y lo haré cuantas veces se me ocurra, sin preocuparme de otra cosa que de mi propia satisfacción. No pretendo, pues, estar contribuyendo con mi granito de arena a echar los cimientos de nuestro teatro. Ni eso ni nada que se le parezca. No me debe el teatro nacional ni desvelos, ni esfuerzos, ni sacrificios. En cambio, le soy deudor de algunos momentos de mi vida. Tampoco he sentido la necesidad, en su obsequio, de ponerme el dedo en la frente para meditar. Escribo porque me divierte, no escribiería si me aburriera. Me complace que el público, en franca camaradería conmigo, se regocije con mis comedias; pero no le guardaría rencor si ocurriese lo contrario. Eso si, no volvería a escribir, pues no tengo interés alguno en aburrir a la gente... Trazo la primera escena, al acaso, tomando dos, tres, cuatro personajes:  dejo el número librado al capricho del momento. Los hago de primera intención viejos o jóvenes, mujeres u hombres, maridos, padres o hermanos, normales o ridículos, discretos o tontos... Me es indiferente. Sólo necesito fijar, en la imaginación, desde ese instante, los tipos definidos. Entonces ya son: cada uno tiene su fisionomía propia, y los veo agitarse, moverse dentro de su manera peculiar. Sé como están los vestidos: conozco hasta su estatura. Sé también como son capaces de pensar y sentir en cada caso.

Sus procedimientos serán en adelante lógicos con ellos mismos. Todo mi trabajo se reduce, pues, a encontrar el tema que suscite la escena inicial. Lo restante ya no va por cuenta mía... Su acción: Mientras escribo la primera escena no tengo idea de cual será la segunda. Tampoco trato de imaginarla. Será la que determinen los hechos mismos: los que de acuerdo con aquellos tiempos que ya existen para mi, ocurrirían en la vida real. Lo propio ocurre con las siguientes respecto de la anterior. Si en el curso del acto entra un nuevo pesonaje es porque lo veo entrar, lo veo también dentro de un tipo definido, y entonces hace lo que necesariamente debe hacer, de acuerdo con su idiosincrasia. La acción se desarrolla así naturalmente, sin esfuerzo de mi parte, sin inventarla casi, pues los personajes construyen un pequeño mundo que poco a poco va tomando forma y adquiriendo consistencia. Yo no gobierno a  mis muñecos; se gobiernan ellos mismos como mejor lo entiendan, dentro de la verdad humana. Es  claro que yo estoy de acuerdo con ellos, y por eso los interpreto..."

Gregorio de Laferrére

 

Elenco: Estela Medina, Susana Bres, Cristina Lagorio, Sonia Repetto, Cristina Machado Luis Manzione, Miguel Pinto, Delfi Galbiati, Juan Worobiov, Mario Palisca, Isabel Legarra

Actores invitados: Daniella Corbo, Rubens Motta

Ayudante de dirección: Alejandro Rey

Escenografía: Bugarín - Acosta

Vestuario: Soledad Capurro

Iluminación: Carlos Torres

Música: Carlos da Silveira

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