Las salas
La Sala Zavala Muniz, inaugurada oficialmente cuando la Comedia Nacional contaba con cuatro décadas de incesante actividad fue, durante más de diez años, algo más que un lugar diferente para hacer teatro, fue la escena en que se crearon excelentes espectáculos.
�
Se accedía por una larga escalera de mármol de dos tramos con los escalones gastados. Al llegar al lugar que, por décadas, había sido sala de exposición de la Comisión Nacional de Bellas Artes, a los espectadores les deparaba la sorpresa de un nuevo uso del espacio escénico.
La idea de transformar la planta alta, del ala oeste del Teatro Solis, en escenario alternativo para la Comedia Nacional surgió de las ?reuniones de producción? cuando se preparaba la versión de Héctor Manuel Vidal de La Boda una de las obras del Brecht joven. Propuesta por Eduardo Schinca, Vidal entendió que debía hacerse en una casa y no en un teatro convencional. Manejaban la posibilidad de hacerla en la entrada por la calle Convención de la Sala Verdi cuando el escenógrafo Hugo Mazza propuso el piso alto del Solís. El director artístico Jaime Yavitz, logró los permisos correspondientes. La principal dificultad era el requerimiento de una segunda salida que solo podía ser por el Museo de Historia Natural que funcionaba en la planta baja. Finalmente la Doctora Adela Reta, mujer vinculada al teatro, antigua integrante de la Comisión de Teatros Municipales sugirió como solución que el director de la Comedia Nacional tuviera llave del Museo para casos de emergencia.
El nuevo espacio escénico permitiría al elenco, acostumbrado trabajar en teatros frontales como la Sala Verdi y el mismo Teatro Solís hacer nuevas experiencias y tener más proximidad con los espectadores.
�
La Boda
En la La boda fue estrenada en diciembre de 1986. Los espectadores eran también los invitados a la fiesta, recibían al llegar el programa de mano en forma de invitación: Armando Halty y Nelly Antúnez, padres de la novia participaban la boda de sus hijos Silvia Carmona, la novia con Miguel Pinto el novio, también participaban Cristina Machado, hermana de la novia, Luis Manzione amigo del novio, Gloria Demassi, la Señora, Dumas Lerena marido de la Señora, Oscar Serra el joven. Desaparecía la frontera entre los actores y el público que era convidado con saladitos y en algunas ocasiones invitado a bailar.
Tuvo mucho éxito, el público disfrutaba y participaba espontáneamente. Fue representada en diversos escenarios barriales en Montevideo, en varios departamentos de Uruguay, en Buenos Aires en un Festival en el Teatro San Martín y representó a Uruguay en el l Festival Iberoamericano de Cádiz de 1990 en España.
En el mismo espacio posterior de la planta en que se representó La Boda, el grupo prevocacional ?B? 1987 de la E.M.A.D. estrenó una creación propia denominada Cuenta un cuento bajo la dirección de la docente Adriana Lagomarsino. De esta experiencia exitosa surgió el grupo denominado Comedia Peñarol .
En Familia
En octubre de 1988, en el espacio contiguo que da a la calle Buenos Aires, se inauguró oficialmente la nueva sala para la Comedia Nacional en homenaje a su fundador el dramaturgo Justino Zavala Muniz. Para hacer honor a su deseo de representar autores uruguayos se puso en escena una renovada versión de En Familia de Florencio Sánchez bajo la dirección de Dumas Lerena. Hugo Mazza usó la estructura edilicia como parte de la casa de la familia, se abría una de las ventanas por la que entraba luz. El elenco estaba integrado por Luis Manzione en un recordado trabajo en el personaje de Eduardo junto a Maruja Santullo, Elisa Contreras, Isabel Legarra, Jorge Triador, Roberto Jones, Susana Bres y Rubens Motta. El vestuario era de Soledad Capurro, la música de Fernando Condon, las luces de Carlos Torres.
En la década siguiente en este espacio se hicieron una veintena de obras que constituyeron otros tantos desafíos para los artistas de la Comedia Nacional.
Las mágicas noches bailables de Pepe Pelayo
La Sala Zavala Muniz está asociada a espectáculos memorables tan diversos como La Boda y En Familia y a la original idea de Dumas Lerena de recrear los bailes populares en Las mágicas noches bailables de Pepe Pelayo de Alberto Paredes y Ana Magnabosco. Contó con arreglos musicales de Raúl Medina y Jaime Roos y la dirección musical de Gregorio Bregstein. El espectáculo comenzaba ya en la escalera que daba acceso al salón de baile creado por Osvaldo Reyno, en que los espectadores se instalaban en mesas y sillas. Pepe Pelayo, el encargado del baile, era encarnado por Armando Halty y en los otros personajes se destacaron Oscar Serra, Nelly Antúnez, Levón y Andrea Davidovics ( los cuatro nominados a los premios Florencio del año 1989), Sonia Repetto, Isabel Legarra, Eugenio Zares y Gloria Demassi.
La presencia en vivo del conjunto Calypso formado por Gregorio Bregstein con Gastón Contenti, Claudio Colafranchesqui, Diego Ebbler, Enrique Cano, Nelson Cedrés y José López acompañaban las pequeñas historias del mundo de los bailes. La iluminación de Carlos Torres y el sugerente vestuario de Soledad Capurro y la coreografía de Florencia Varela y Verónica Steffen completaron este espectáculo entretenido y experimental.
Troyanas
Con una platea lateral, Carlos Pirelli, también diseñador del vestuario, aprovechó muy bien el espacio de la nueva sala Zavala Muniz, sugiriendo la amplitud de la playa con un piso acolchonado blanco. Las luces de Carlos Torres acercaban las llamas del incendio de Troya. La impecable versión de Eduardo Schinca de Las Troyanas de Eurípides titulada Troyanas, con excepcional trabajo protagónico de Maruja Santullo en el papel de Hécuba, buscaba acercar el drama al presente del espectador con dos personajes, Talthybios (Delfi Galbiati) y Menelao (Levón), vestidos con trajes de cuero y portadores de objetos anacrónicos, relojes, cigarrillos y linternas. Estela Medina interpretó con mucha fuerza y emoción a su Casandra, mientras Marina Sauchenco hacía lo propio con Andrómada y Elisa Contreras brindaba con naturalidad la belleza de Helena. Música de René Pietrafesa envolvía la tragedia.
Los dioses, Andrea Davidovics en el papel de Atenea y Levon como Poseidón estaban vestidos de blanco. Considerada por la crítica como la mejor versión hecha en el país fue llevada al festival de Teatro Clásico de Mérida y a Sevilla en España y se presentó también en Buenos Aires.
Nelly Goitiño dirigió en la Sala Zavala Munizo dos obras: su adaptación de El Castillo de Franz Kafka y una ingeniosa puesta de Oh los días felices de Samuel Becket.
El Castillo
Centrada en el hombre y la búsqueda de la libertad esta adaptación teatral de la novela de Kafka fue puesta en escena por la directora Goitiño con un elenco muy numeroso encabezado por Levón quien era ?K? acompañado por Sonia Repetto, Delfi Galbiati, Oscar Serra, Eduardo Schinca, Marina Sauchenco, Susana Bres, Jorge Triador, Elisa Contreras, Andrea Davidovics, Isabel Legarra Miguel Pinto, Nelly Antunez, , Daniel Spino Lara, Domingo Pistoni, Eugenio Zares, José Luis Morales, Alejandro Inzaurralde, Fernando Gallego, Walter Rey, Rubens Motta, Marín Alfonso. La escenografía fue creada por Carlos Musso, el vestuario por Carlos Pirelli y la iluminación por Carlos Torres y la ambientación musical por Renée Pietrafesa.
Nelly Goitiño escribió para el programa de mano: ?Amenaza y miedo, reglamentos y órdenes, vigilancia y rechazos, jerarquías infinitas y postergaciones, castigo sin acusación, son las formas empleadas por ?El Castillo? para organizar la convivencia.
Al cometer el error inicial de ingresar, ciego, a esas estructuras, K padecerá ?compelido- la peripecia que culminará con la pérdida de sentido de su propósito inicial: realizar su condición de hombre libre.?
En los premios Florencio de 1989 El Castillo fue nominado en la categoría Espactáculo, Dirección, Actor ( Levón), Actor de reparto (Delfi Galbiati), iluminación, ambientación sonora
¡Oh!, los días felices
En versión de Beatriz Falcao con escenografía de Claudio Goeckler fue protagonizada por Gloria Demassi como Winnie y Mario Palisca como Willie. Según la directora es una parábola del ser inauténtico, ?El empleo de un lenguaje visual metafórico (la mujer enterrada, la sombrilla levantada irreflexible que da lugar a una situación de la que no sabe como salir, la musicalidad del texto (escrito como una partitura) y el humor, con la anarquía de la disociación, del objeto insólito, hacen de esta obra maestra- a la vez- un regocijo y un desafío?
La Danza de la muerte
Dumas Lerena también dirigió La danza de la muerte de August Strindberg con Estela Medina, Jaime Yavitz y Armando Halty. Escenografía de Hugo Millán, vestuario de Amalia Lons, música de Fernando Condon y las luces de Carlos Torres.
Las aventuras de Tirante el Blanco
El actor y director uruguayo, exiliado en Argentina Villanueva Cosse también tuvo oportunidad de trabajar en la Sala Zavala Muniz en 1996 al dirigir a un numeroso elenco en Las aventuras de Tirante el Blanco de Francisco Nieva. Junto a las figuras del elenco municipal, Levón, Gloria Demassi, Mario Palisca, Daniel Spino Lara, Julio Calcagno, Juan Alberto Sobrino, trabajaron jóvenes egresados de la Escuela Municipal de Arte Dramático como Marcos Valls, Marisa Bentancourt, Roxana Blanco, Daniela Corbo, María Mendive, Alejandra Wolf y Alberto Rivero en la ayudantía de dirección. Otros artistas del teatro independiente fueron contratados especialmente como Héctor Guido, Mary Da Cunha, Rodolfo Da Costa. La escenografía fue creada por Hugo Mazza, las luces por Carlos Torres, el vestuario por Alejandra Stewart y la música por Sylvia Mayer.
Después de la caída
Al año siguiente se estrenó Después de la caída de Arthur Miller en versión y dirección de Júver Salcedo, con Claudia Rossi en el papel de Maggie y Julio Calcagno en el de Quentin y Catherina Pascale en el de Holga. Sobre la obra el autor escribió: ?Esta pieza no es un alegato pro domo ni una acusación. Es simplemente abierta y claramente, una toma de posición frente a la responsabilidad del hombre con respecto a sus actos?.
El volatinero
El volatinero de Jean Genet en versión libre de Teresa Trujillo contó con la escenografía de Osvaldo Reyno, las luces de Carlos Torres, el vestuario de Alejandra Stewart, la música de Jorge Camiruaga. Los personajes Volatinero, Poeta, Muerte, Mago-Domador son representados por Levon, Oscar Serra, Sonia Repett e Ismael Da Fonseca respectivamente. Los caballos por Andrea Fantoni y Alicia Garateguy y los Clowns por Mario Palisca, Ismael Da Fonseca, Andrea Fantoni, Alicia Garateguy, Levon, Sonia Repetto y Oscar Serra.
Los ciegos
En Los ciegos de Maurice de Maeterlink bajo la dirección de Héctor Manuel Vidal el público se enfrentaba a un grupo de personas ciegas encarnadas por de Roberto Jones, Daniel Spino Lara, Oscar Serra, Armando Halty, Estela Medina, Elisa Contreras Gloria Demassi, Susana Bres, Mario Palisca, domingo Pistoni, Silvia Carmona, Mariana Piazza. Esceonografía de Claudio Goeckler, vestuario de Soldead Capurro, luces de Carlos Torres, música de Renée Pietrafesa.
Teatro latinoamericano
Todo desnudo será castigado
De autores latinoamericanos, la Comedia Nacional estrenó por primera vez una obra de Nelson Rodrigues, considerado como el creador de la moderna dramaturgia brasileña, Todo desnudo será castigado traducida y dirigida por Omar Varela. La original escenografía, mezcla de burdel y carro de carnaval, perteneció a Claudio Goeckler, el vestuario de Nelson Mancebo, la música de Carlos García interpretada por Leslie Muñoz, Carlos Rodríguez, Alejandro Tuana y Carlos Sastre y canciones de Dalva de Oliveira y Elizeth Cardoso. Las luces de Carlos Torres. Las pelucas de las tías fueron una creación de Heber Vera. En el papel de Herculano se destacó Armando Halty acompañado por Silvia Carmona como Nazaré y Domingo Pistoni como Patricio. Las tres tías eran Nelly Antúez, Marina Sauchenco y Cristina Lagorio. Geni I fue una recordada labor de Isabel Legarra y Geni II Claudia Rossi, en el resto de los personajes participaron Luis Manzione, Daniel Spino Lara, Mario Palisca, Miguel Pinto, Roxana Blanco y Elizabeth Fernández.
En diciembre de 1990 este espectáculo fue nominado para los premios Florencio, en las categorías Espectáculo, Director, Actor, Vestuario e Iluminación resultando ganadores Armando Halty, Nelson Mancebo y Carlos Torres
Dostoievski va a la playa
El estreno mundial de Dostoievski va a la playa del chileno Marco Antonio de la Parra fue responsabilidad del director Luis Vidal. Del texto se ha dicho que no es una obra de teatro en un sentido tradicional, sino que se parece más a un guión cinematográfico.
El marco escénico fue creado por Osvaldo Reyno el vestuario por Concepción Masachs, las luces por Jorge Nocetti y la música por Jorge Drexler. El elenco encabezado por Delfi Galbiati como Dosto, Gloria Demassi como Natasha, Susana Bres como Teresa, Claudia Rossi como Cecilia y Juan C. Worobiov era el Doctor. Los acopañaban Danhiel Spino Lara, González Santurio, Mauro Cartagena, Walter Speranza, Alvaro Pozzzolo, Silvia Carmona, Andrea Davidovics y Daniela Corbo.
El Bizco
Ernesto Clavijo dirigió su propia versión de El Bizco de la argentina Marta Degracia con Gloria Demassi, Juan Alberto Sobrino, Julio Calcagno y Sivia Carmona. La escenografía de Enrique Badaró Nadal, la música de Carlos García, las luces de Carlos Torres y el vestuario de Elizabeth Varga.
Autores uruguayos
Los Muertos
En 1994 Marcelino Duffau fue invitado a dirigir Los Muertos de Florencio Sánchez con Oscar Serra, Elisa Contreras y Sonia Repetto en los papeles principales. La escenografía y vestuario fueron de Ana Arrospide. En esa oportunidad dispuso el espacio de forma bifrontal.
La máquina rota
En La máquina rota de Jacobo Langsner, según Jorge Abbondanza, ?desfila un grupo de seres apagados, nostálgicos, declinantes, para los cuales la vida se atascó igual que esa máquina de tejer, pero el cuadro trasluce valores y perfiles menos casuales delata (como otros tantos ejercicios de naturalismo o de sátira en Langsner) el despotismo, la mezquindad, la intolerancia, la torpeza moral o la voracidad que son espejo de un mundo real donde el espíritu también se desgasta bajo esas presiones.? Bajo la dirección de Jaime Yavitz, actuaron Isabel Legarra, Armando Halty, Marina Sauchenco, andrea Davidovics, gloria Demassi, Graciela Escuder y Miguel Pinto. El vestuario fue creado por Laura Lockart, la escenografía por Claudio Goeckler y las luces por Carlos Torres.
Además de En Familia, Los Muertos de Sánchez, Las mágicas noches bailables de Pepe Pelayo de Alberto Paredes y Ana Maganabosco y La máquina rota del consagrado Jacobo Lagsner se representaron varias obras de autores uruguayos, dos de de misma Ana Magnabosco: Familiares del Sr. González dirigida por Elena Zuasti en 1991 y La perseguida hasta el catre con dirección de Hugo Blandamuro en 1995.
Otras resultaron seleccionadas en concursos de dramaturgia organizados por el Departamento de Cultura de la I.M.M., como Mi familia de Carlos Liscano (premiada en 1996) y La Dorthy y el Mondeja de Nelson Flores (premiado en 1995) representadas en forma simultánea dirigidos respectivamente por Ernesto Clavijo y Luis Cerminara.
Ganadora de una mención en uno de los concursos fue la adaptación de Walter González de la novela Crónica de un crimen de Justino Zavala Muniz que llevó a escena Ruben Yáñez, protagonizada por Duilio Borch. Si bien se representó primero en Paysandú y en la sala Carlos Brussa en Montevideo, la mayor parte de las funciones se llevaron a cabo en la sala Zavala Muniz. En 1997 Carlos Aguilera puso en escena la obra de Mary Vázquez La memoria donde ardía con música de Fernando Cabrera
Casi todos los espectáculos nombrados fueron premiados, invitados a festivales y supusieron una riquísima experiencia para la Comedia Nacional que una vez más respondió con su calidad ética y estética al desafío de la sala polifuncional que permitía la creatividad de escenógrafos como Claudio Goeckler, Hugo Mazza, Osvaldo Reyno, Hugo Millán, Carlos Pirelli, también vestuarista, junto a Soledad Capurro, Nelson Mancebo, la destacada iluminación de Carlos Torres en la casi totalidad de los espectáculos y el aporte de músicos como Fernando Condon, Gregorio Bregstein, Renée Pietrafesa.
Actuaciones inolvidables de Maruja Santullo, Nelly Antúnez, Estela Medina, Armando Halty, Marina Sauchenco, Dumas Lerena, Isabel Legarra, Gloria Demasi, Elisa Contreras, Susana Bres, Jorge Triador, Roberto Jones, Sonia Repetto, Levón, Delfi Galbiati, Juan Alberto Sobrino, entre otros muchos artistas, contribuyeron a un período de esplendor de la Comedia Nacional. Con la vuelta a la democracia al país, en esta sala ?la Comedia? tuvo oportunidad de crear espectáculos que, en giras y festivales, dejaron en alto el prestigio del elenco reconocido a nivel latinoamericano y mundial.
�
Espectáculos de la Comedia Nacional representados en la Sala Zavala Muniz
1986
La Boda de B.Brecht dirección Héctor Manuel Vidal
1988
En Familia de Florencio Sánchez dirección Dumas Lerena
1989
El Castillo de F. Kafka, dirección Nelly Goitiño
Las mágicas noches bailables de Pepe Pelayo de Alberto Paredes y Ana Magnabosco
dirección Dumas Lerena
1989
Todo desnudo será castigado de Nelson Rodrigues, dirección Omar Varela
1990
Troyanas de Eurípides, dirección Eduardo Schinca
1991
Familiares del Sr. González de Ana Magnabosco, dirección Elena Zuasti
¡Oh!, los días felices de Samuel Beckett, dirección de Nelly Goitiño
1992
Los ciegos de Maeterlinck, dirección Héctor Manuel Vidal
1993
Dostoievski va a la playa de Marco Antonio de la Parra, dirección Luis Vidal
1994
Crónica de un crimen de Justino Zavala Muniz, dirección Ruben Yáñez
Los muertos de Florencio Sánchez, dirección Marcelino Duffau
Volatineros de J Genet, dirección de Teresa Trujillo
Danza de la muerte de A Strindberg, dirección Dumas Lerena
1995
El bizco de Marta de Gracia, dirección Ernesto Clavijo
La perseguida hasta el catre de Ana Magnabosco, dirección Hugo Blandamuro
1996
La máquina rota de J Langsner, dirección Jaime Yavitz
Las aventuras de Tirante el blanco de Francisco Nieva, dirección Villanueva Cosse
1997
La memoria en donde ardía de Mary Vázquez, dirección de Carlos Aguilera
1998
La Dorthy y el Mondeja de N. Flores, dirección de Luis Cerminara y Mi Familia de C.Liscano, dirección Ernesto Clavijo (representación conjunta)